Max Scherzer está a favor de una reforma total de los playoffs, donde el equipo que obtenga la mejor foja diputaría la primera ronda de una postemporada, expandida a un máximo de cinco encuentros, con una ventaja de 1-0.
Las Grandes Ligas y los peloteros, quienes reanudarán las negociaciones este domingo, podrían expandir la postemporada a partir de 10 equipos, el número que se ha mantenido desde 2012, salvo en el caso de la campaña de 2020, abreviada por la pandemia, cuando avanzaron 16.
El sindicato prefiere 12, y las partes parecen encaminarse a ese número. Sin embargo, Scherzer dijo que los peloteros considerarían la posibilidad de aceptar 14 si los clubes acceden a ese formato que otorgaría al líder una “victoria fantasma”.
Bajo el plan de 14 equipos de las mayores, el campeón divisional con el mejor récord durante la campaña regular en cada liga avanzaría directamente a la Serie Divisional. Los otros dos monarcas de división elegirían a sus oponentes y estarían en casa durante toda la serie de primera ronda a un máximo de tres juegos.
El líder divisional con la segunda mejor foja elegiría a su rival de entre los tres menores clasificados como comodines. El ganador de división con el tercer mejor récord tendría que escoger entonces de entre los dos comodines restantes.
El comodín principal se mediría con el equipo que quede después de que los líderes divisionales hagan sus elecciones, y jugaría también todos los duelos como local.
Todas esas selecciones se realizarían durante un programa transmitido por la televisión.
«Sentimos que la competencia podría erosionarse en ese escenario y teníamos ejemplos específicos de jugadores diferentes que plantearon eso específicamente, dijo Scherzer, luego que las negociaciones laborales se rompieron el martes.
“Continuar con el formato de esos tres campeones divisionales hacia abajo no aportaba, según vemos, un incentivo apropiado para esos otros dos ganadores divisionales”, añadió el pitcher de los Mets de Nueva York. “No entendimos por qué no querían ponernos en un formato más competitivo”.
El paro cumplió 49 días el sábado. Esta semana, el comisionado Rob Manfred canceló las primeras dos series de la campaña regular, que debía inaugurarse el 31 de marzo.
Se espera que los peloteros respondan el domingo a la oferta más reciente de las Grandes Ligas, la última antes de la ruptura del martes.
Antes de ese rompimiento, los peloteros dijeron que podían acceder a una postemporada de 12 clubes, sujeta a un acuerdo general. Sigue habiendo la posibilidad de que el escenario de 14 equipos vuelva a la mesa de discusiones, dependiendo de lo que ocurra en las últimas etapas de éstas.
El sindicato ha hecho sólo planteamientos verbales. No está claro si presentará una propuesta formal. Bajo su plan, el primer preclasificado sería local en todos los juegos de la serie y necesitaría dos triunfos para avanzar.
El visitante tendría que ganar tres duelos.
Un conjunto que avance automáticamente a la siguiente fase tendría al menos cinco días de descanso, lo que podría complicar los planes de los pitchers abridores. Los fanáticos del equipo con la preclasificación más baja no tendrían la oportunidad de verlo en casa en los playoffs.
Scherzer expresó sus argumentos a favor del plan el lunes, durante una reunión con Dick Monfort, director general de Colorado. Las mayores informaron al sindicato que no están interesadas.
Los dirigentes no estarían seguros de que el juego “fantasma” sea del agrado de las empresas televisivas o de los fanáticos.